En esta oportunidad hablaremos de la importancia de la sinceridad; pero no con los demás, a pesar de que ES importante, sino que nos inclinaremos hacia lo que podríamos denominar como el "autoengaño".
Los seres humanos utilizamos, como mecanismo de defensa frente a diversas situaciones (ya sean embarazosas, humillantes o de cierta importancia), la mentira, aunque también las usamos para zafar, pero eso no tiene mucho que ver con este tema.
Tenemos como costumbre repetirnos una y otra vez esa mentira, hasta que se nos grabe en la cabeza. Nos apartamos de la realidad, y nos unimos a las filas de la soledad, porque aunque no parezca, son estas mentiras las que nos alejan del resto de las personas; creamos nuestro propio mundo aparte, en el cual escuchamos lo que queremos escuchar, y vemos solamente aquello que no nos hace mal.
La vida se vuelve . . . . y he aquí mi dilema. Por más que lo pienso no puedo llegar a una conclusión. ¿Estará bien o mal engañarse de esa manera? ¿Nos ahorra sufrimiento o simplemente nos lo oculta hasta que esa burbuja explota?
Le mando un saludo a Mica C, del blog circulemoslibremente, no porque ella sea un ejemplo de persona que se engaña a si misma (o tal vez si, nose), sino porque es una amiga que me enseño la importancia de un corazón noble y valiente.
2 comentarios:
Holass!!=)
Muy buen cuestionamiento ese... ¿Qué es mejor?
... Una mentira que te haga feliz aunque estes viviendo una farsa?
o... una verdad que te amargue la vida?.. y ahi estarias viviendo la realidad..
La respuesta a eso va a depender de la persona qe lo piense.. porque todos pensamos diferente...
Personalmente prefiero la mentira porque al menos soy feliz ajjaja
Me encanto el artículo=)
pase chicos=)
www.cuidaalmundo.blogspot.com
pasen=)
saluditos=D
Muy buena publicación y aclaro que no me engaño a mi misma. Gracias por el saludo amigos :) un beso.
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